jueves, 4 de abril de 2013

¿Conoces Mavala?

Hemos hecho un pequeño parón en el blog debido a las vacaciones pero ya estamos aquí de nuevo con fuerzas renovadas. Además de las fuerzas también hemos renovado producto así que hoy os vamos  a presentar una nueva linea para el cuidado de las manos y uñas. Con nueva nos referimos a nueva para la farmacia ya que Mavala lleva casi 50 años dedicado a solucionar los problemas relacionados con el cuidado y la belleza de las manos, centrándose principalmente en las uñas.
Mavala nos permite embellecer nuestras uñas con preciosos colores pero además tratar diferentes patologías  y solucionar problemas que surgen con más frecuencia de la que nos gustaría.

Para poder entender mejor como actúa cada producto vamos a centrarnos en conocer más sobre las uñas y nadie mejor que Mavala para darnos esa explicación de manera profesional  y eficiente.

¿Qué es una uña?
La punta de la uña es una lamina flexible de tejido córneo formada por el endurecimiento natural de las células epidérmicas. Una uña completa tarda entre 3 y 5 meses en crecer. El desarrollo de la uña, que en realidad está compuesta de tres capas, siendo la capa externa la más dura, se puede ver afectado por muchos factores: su composición genética, la nutrición, la salud (que o puede afectar al estado de las uñas), el medio ambiente... Además de la queratina, la uña contiene una moderada concentración de oligoelementos, como azufre, selenio, calcio y potasio.

¿Qué misión tiene?
La uña protege la punta del dedo y sirve para coger objetos pequeños, rascar, arañar, ... También parece ser indispensable para la sensibilidad de la yema del dedo.

Antiguamente, las uñas también eran útiles herramientas de defensa (arañar, cortar, desgarrar). Posteriormente adoptaron connotaciones culturales, como en el caso de las uñas grotescamente largas de los mandarines chinos.

Hoy las uñas son una parte intrínseca de nuestro aspecto, aunque aún sigue teniendo un uso práctico.

¿Uñas dañadas? ¿Por qué?
La salud débil y una dieta desequilibrada pueden inhibir el crecimiento de la uña, y también influir en el estado de las uñas que por lo demás serían saludables. El daño resultante puede manifestarse a corto plazo y requiere de atención inmediata. En primer lugar hay que determinar la causa de esa anomalía en las uñas.
Causas internas:
En general, cualquier afección circulatoria que reduzca el aporte de sangre a la matriz de la uña impide que que ésta reciba la nutrición adecuada y se desarrolle normalmente. Otros problemas de salud incluyen trastornos glandulares, un mal metabolismo, alergias, anemia o falta de calcio, de algunos aminoácidos y de otros nutrientes esenciales.
Las causas internas deberán consultarse a un  dermatólogo para que les dé el tratamiento adecuado.
Causas externas:
Una uña sana puede resultar dañada de muchas formas, por ejemplo:

  • Contacto directo con disolventes, detergentes fuertes y otros productos de limpieza.
  • Sobreexposición al sol o ambiente seco.
  • Presión excesiva o golpe fuerte con un objeto duro.
  • Aplicación de esmalte de uñas directamente sobre la uña, sin protegerla antes con una base protectora.
Para remediar estos factores externos, hay que evitarlos protegiendo las uñas con guantes, crema con protección solar y productos de tratamiento MAVALA, dependiendo del caso.

Poco a poco iremos preparando post sobre los productos, de momento os diremos que la calidad de los esmaltes es excepcional, con una sola capa conseguimos un acabado perfecto.


Son consejos de M70farMA.


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